Perdida, asustada, no sabes donde acudir.
Las señales no te ayudan y necesitas saber hasta donde debes llegar.
Despues de media hora de vueltas sin sentido consigues llegar a tu fin...ahi está.
Cual cenicienta retrasada 5 minutos de la hora del baile por numerosas dificutades surgidas en su camino, te encuentras con 100 pares de ojos incrustados en tu nuca que comentan a tu alrededor de dónde aparecio esa niña disfrazada en cuerpo de mujer.
Llegas hasta el final del salon y consigues acomodarte en un lugar del que visualizas toda la zona.
Cuando menos te lo esperas todo acaba, en menos de 10 minutos hablas como si nada y esa tension que te envolvia ace tan solo unos segundos se a esfumado.
El problema es que crees que ha desaparecido, pero sigue ahi.
martes, 30 de septiembre de 2008
jueves, 4 de septiembre de 2008
Preinscripción
Lo que antes era un pequeño hall, se ha convertido en un gran salón de baile, y aunque lleves la invitacion en tu mano, sientes que fue un error, y que tu no estas invitado. Todos tiene su pareja, y tu una vez mas te sientes abandonado. Te agarras a la columna mas desierta y esperas a que llegue tu turno. Te acostumbraste a ser tan grande en tu colmena que al salir al exterior te has dado cuenta que eres un insignificante puntito mas en el mundo. Cierras los ojos esperando que todo pase, pero la mala noticia es que todo esto no ha hecho mas que comenzar.
Suspiras, y sigues adelante, no te que otra.
Miras alrededor buscando algo que te resulte familiar, pero acabas mareado y terminas por sentarte para poder aclarar tus dudas, nadie te dijo que el camino fuese facil, pero tu horrible cabezoneria te hizo entrar en ese laberito donde no encuentras la salida, mejor dicho, donde no quieres encontrarla.
Llega tu turno, ese inauduble pitido de carniceria señala que te toca a ti. Sueltas la columna y sales a pista. Has pasado de tener un nombre a ser un simple número, y de una señada dan por finalizado el comienzo de algo que ni si quiera sabes que coño sera.
Ni si quiera te dejan bailar, porque no vas acompañado.
Quizas en la proxima vuelta te den esa oportunidad. Mientras tanto, espera en casa que vuelvan a llamarte.
Suspiras, y sigues adelante, no te que otra.
Miras alrededor buscando algo que te resulte familiar, pero acabas mareado y terminas por sentarte para poder aclarar tus dudas, nadie te dijo que el camino fuese facil, pero tu horrible cabezoneria te hizo entrar en ese laberito donde no encuentras la salida, mejor dicho, donde no quieres encontrarla.
Llega tu turno, ese inauduble pitido de carniceria señala que te toca a ti. Sueltas la columna y sales a pista. Has pasado de tener un nombre a ser un simple número, y de una señada dan por finalizado el comienzo de algo que ni si quiera sabes que coño sera.
Ni si quiera te dejan bailar, porque no vas acompañado.
Quizas en la proxima vuelta te den esa oportunidad. Mientras tanto, espera en casa que vuelvan a llamarte.
martes, 2 de septiembre de 2008
Se nos olvido lo mas importante...
Se nos olvido lo más importante...
Estábamos tan alterados por el gran momento, tan emocionados porque llegase el fin de tantos dolores de cabeza, que se nos olvidó lo mas importante.
Y es que no podemos negar que han sido unos maravillosos años que han formado parte de cada una de nuestras vidas. Los hay que se llevan seis años en su recuerdo, y otros que con tan solo un par de ellos han sabido sentirse uno mas de la familia. Porque si hay algo de lo que no dudamos es que en cierto modo, hemos sido un gran número de hermanos rodeados de unos "papis" que han sabido criarnos entre algodones, amargos pero llenos de dulzor, suaves pero con mas de un cardo capaz de ponernos firme en su momento.
Hemos crecido juntos y vivido toda clase de emociones y aventuras que recordaremos como primeras en nuestro cuaderno de anotar anécdotas.
Aunque mas de un improperio a destiempo nos a llevado a rifi-rafes atrevidos, no podemos olvidar a esos instructores de la vida que han sabido guiarnos en cada momento intentando hacerlo lo mejor posible, para no fallar ni errar en cada empujocinto que nos mandaban desde la mejor de las intenciones. Perdiendo desde la paciencia hasta cada segundo de tiempo libre solo por aclararnos dudas y marañas mentales. Ofreciéndonos pañuelos y abrazos cuando nos veian desvalidos y regalándonos sonrisas en momentos de tensión. Exámenes, viajes, nervios, amores, desengaños, horas y mas horas de clases...tanto tiempo juntos...
Tampoco podemos abandonar los hermosos recuerdos que nos quedan de nosotros mismos. Grandes compañeros, hermanos si me permiten, esa gran clase de sueños que tanto hemos pasados juntos. Hemos reido juntos y tambien hemos llorado. Nos hemos sabido ayudar en los peores momentos, aguantando la situacion y arrimando el hombro cuando era necesario. Hemos vivido una etapa de nuestra vida que no podemos borrar de nuestra mente porque siempre permanecera ahí. Fiestas, nervios, desvelos, horas de estudio, risas, primeras borracheras y primeros besos, primeros suspensos y matrículas de honor...primeras experiencias inolvidables.
Pero estábamos tan aturdidos, que se nos olvidó lo mas importante...
Tan preocupados por que llegara el final, el último dia, los últimos exámenes y rápidamente la graduación, como la típica despedida a lo grande donde cada cual luce sus mejores galas, los profesores nos dicen adios y los alumnos dan las gracias con un elaborado discurso.
No nos mal interpreteis, pero si hay algo que nos determina es la nota de innovacion y el querer destacar por ese toque excéntrico que tanto nos caracteriza. No queriamos aburriros con los "típicos tópicos" anglosajones, como el discurso que a todos aburre y ya sabe como va a acabar, nos conformamos con disfrutar el momento, asi somos la generación del 90.
Aunque ser un tanto singulares, no debe desembocar en ser maleducados, puesto que no nos enseñasteis a eso.
Y es que estábamos tan estremecidos que se nos olvido lo mas importante.
Por ello, antes de que se vuelva a olvidar, queremos decir que habeis grabado una parte en nosotros que marcará más de una decisión en el largo recorrido que nos queda por vivir, porque aunque hace unos meses celebrásemos el final, acabamos de comenzar una nueva etapa de nuestras vidas.
Estábamos tan aturdidos que se nos olvido decir
muchas gracias,
a todos
GRACIAS
Estábamos tan alterados por el gran momento, tan emocionados porque llegase el fin de tantos dolores de cabeza, que se nos olvidó lo mas importante.
Y es que no podemos negar que han sido unos maravillosos años que han formado parte de cada una de nuestras vidas. Los hay que se llevan seis años en su recuerdo, y otros que con tan solo un par de ellos han sabido sentirse uno mas de la familia. Porque si hay algo de lo que no dudamos es que en cierto modo, hemos sido un gran número de hermanos rodeados de unos "papis" que han sabido criarnos entre algodones, amargos pero llenos de dulzor, suaves pero con mas de un cardo capaz de ponernos firme en su momento.
Hemos crecido juntos y vivido toda clase de emociones y aventuras que recordaremos como primeras en nuestro cuaderno de anotar anécdotas.
Aunque mas de un improperio a destiempo nos a llevado a rifi-rafes atrevidos, no podemos olvidar a esos instructores de la vida que han sabido guiarnos en cada momento intentando hacerlo lo mejor posible, para no fallar ni errar en cada empujocinto que nos mandaban desde la mejor de las intenciones. Perdiendo desde la paciencia hasta cada segundo de tiempo libre solo por aclararnos dudas y marañas mentales. Ofreciéndonos pañuelos y abrazos cuando nos veian desvalidos y regalándonos sonrisas en momentos de tensión. Exámenes, viajes, nervios, amores, desengaños, horas y mas horas de clases...tanto tiempo juntos...
Tampoco podemos abandonar los hermosos recuerdos que nos quedan de nosotros mismos. Grandes compañeros, hermanos si me permiten, esa gran clase de sueños que tanto hemos pasados juntos. Hemos reido juntos y tambien hemos llorado. Nos hemos sabido ayudar en los peores momentos, aguantando la situacion y arrimando el hombro cuando era necesario. Hemos vivido una etapa de nuestra vida que no podemos borrar de nuestra mente porque siempre permanecera ahí. Fiestas, nervios, desvelos, horas de estudio, risas, primeras borracheras y primeros besos, primeros suspensos y matrículas de honor...primeras experiencias inolvidables.
Pero estábamos tan aturdidos, que se nos olvidó lo mas importante...
Tan preocupados por que llegara el final, el último dia, los últimos exámenes y rápidamente la graduación, como la típica despedida a lo grande donde cada cual luce sus mejores galas, los profesores nos dicen adios y los alumnos dan las gracias con un elaborado discurso.
No nos mal interpreteis, pero si hay algo que nos determina es la nota de innovacion y el querer destacar por ese toque excéntrico que tanto nos caracteriza. No queriamos aburriros con los "típicos tópicos" anglosajones, como el discurso que a todos aburre y ya sabe como va a acabar, nos conformamos con disfrutar el momento, asi somos la generación del 90.
Aunque ser un tanto singulares, no debe desembocar en ser maleducados, puesto que no nos enseñasteis a eso.
Y es que estábamos tan estremecidos que se nos olvido lo mas importante.
Por ello, antes de que se vuelva a olvidar, queremos decir que habeis grabado una parte en nosotros que marcará más de una decisión en el largo recorrido que nos queda por vivir, porque aunque hace unos meses celebrásemos el final, acabamos de comenzar una nueva etapa de nuestras vidas.
Estábamos tan aturdidos que se nos olvido decir
muchas gracias,
a todos
GRACIAS
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